KITTY SE HA PERDIDO
Eduardo & Kitty, 2014 |
Lo habíamos adoptado el otoño del 2007. Y llegó para remediar una situación: Dorothy, mi única hija, al no tener hermanos venía exigiendo su derecho a contar por lo menos con una mascota.
Yo nací dentro de una familia que mantuvo sus distancias con los perros, pero que amó a los gatos. Crecí rodeado de una familia grande, y de muchísimos gatos... ¡todos de color negro! Mi padre disfrutaba con fruición de una infundada fama de “brujo”, y él mismo atizaba la hoguera de su reputación criando mininos que sólo tuvieran el oscuro color de las sombras.
Una docena de gatos negros comían pan sobre el mostrador de nuestra tienda de abarrotes. Las gatas parían sin cesar en las cajas de cartón donde mi madre guardaba la ropa. Y no faltaban algunos que hacían huecos en el suelo de tierra de nuestras habitaciones para hacer sus necesidades. A nosotros no nos importaba mucho, entonces el mundo era demasiado nuevo y la vida un torrente de felicidad.
Mi hija llevaba ya algunos años exigiendo “su” gato. Yo evité su pedido mientras pude. La verdad es que no quería tener en la casa una fuente extra de trabajo, pero llegó el día en que finalmente cedí. Dorothy tenía casi nueve años de edad cuando acudió a la oficina de la S.P.C.A. (Society for the Prevention of Cruelty to Animals) en la vecina ciudad de Stratham, y dijo: “Quiero adoptar un gatito”.
Aquel día la S.P.C.A. tenía un buen número de gatos grandes pero sólo cinco cachorritos. Dorothy no necesitó “estudiar” a cada uno de ellos para hacer su elección. Un minino caminó directamente hacia ella y le robó el corazón. Fue amor a primera vista. Ya de vuelta en casa, cuando nos preguntamos ¿qué nombre le ponemos?, Dorothy dijo: “Será simplemente Kitty (Gatito)”.
Ante la disyuntiva de criarlo como un indoor o outdoor cat, decidimos darle libertad para salir a la calle. Abrí un hueco en la puerta trasera y coloqué una ventanilla o “gatera”. Las puertas aquí tienen una contrapuerta (o puerta antitormenta), así que cada madrugada abro esta segunda puerta y la cierro por las noches, permitiendo a Kitty acceso libre a través de su “gatera”.
Escuela Primaria de Rollinsford, New Hampshire
(Ubicada casi frente a la casa de Eduardo)
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Kitty es parte de mi familia. Su naturaleza amistosa nos alegra la vida. Dentro de la casa juega, duerme y espera impaciente por sus comidas. Afuera persigue ardillas y visita a sus amigos. Conoce el momento en que los vecinos regresan de sus trabajos, y la hora de salida de la escuela. Al pasar los estudiantes frente a la casa, Kitty los espera para jugar.
La noche en que Kitty asustado desapareció a través de su “gatera”, ambos habíamos tenido una “desavenencia” y yo perdí la calma. Me encontraba cocinando a cuatro hornillas y lavando platos al mismo tiempo, y él insistía por su comida. En mi reloj todavía faltaba media hora para su cena, y entonces ocurrió... yo lancé un grito e hice el ademán de perseguirlo. Kitty salió disparado. Y ya no regresó.
Media hora más tarde llegaron a la casa mi esposa e hija. Kitty no se hizo presente para saludarlas, y tampoco estuvo para su cena. New Hampshire soportaba un invierno helado y se hallaba cubierto de nieve. Sin lugar a dudas, la seguridad de Kitty se encontraba en peligro.
Iniciamos entonces una búsqueda pertinaz que duró siete días y siete noches. Recorrimos parte del pueblo al revés y al derecho; rastreamos bosques, ríos, puentes y acequias; chequeamos patios traseros, esquinas y covachas. Aprovechamos cada minuto posible de luz natural, y por las noches continuamos con linternas de mano. “Kitty, Kitty, Kitty” repetíamos, y la oscuridad silente nos devolvía sólo el eco de nuestro propio llamado.
Soy el único inmigrante latino en Rollinsford, pequeño pueblo donde vivo. Aquí no hay latinoamericanos, o gente de color, o ninguna otra minoría étnica. La población es exclusivamente blanca. No existe la multiculturalidad que la diversidad estimula. Y los lugareños mantienen una cordialidad distante e inexpugnable. Pero cierto es también que uno de sus rasgos inequívocos es el entrañable amor que profesan por sus animales y mascotas.
Durante la búsqueda de Kitty, en árboles y postes colocamos un centenar de afiches invocando a la población por información. Las llamadas telefónicas de solidaridad no se hicieron esperar, y también información bien intencionada pero inexacta. Los estudiantes, a la salida de la escuela se detenían frente a la casa con la ilusión de encontrar buenas noticias. Mientras tanto la contrapuerta de la casa permanecía abierta día y noche esperando el regreso de Kitty.
Una noche recibimos una llamada. Alguien había avistado un gato parecido al nuestro y dejó una dirección. Fuimos al lugar y no encontramos a Kitty, pero vivimos una singular experiencia. Se trataba de una propiedad grande con áreas de cultivo, granero, cobertizos... y había docenas de gatos sin dueño por todas partes. El propietario los alimentaba y daba refugio en esta “Casa de Gatos”. Fue una visión conmovedora que me recordó a los gatos techeros del barrio de mi niñez.
A las siete de la noche del miércoles 5 de enero del 2012 me encontraba en la misma ubicación de ocho días atrás: lavando platos, y de espalda a la puerta por donde Kitty salió por última vez. Dorothy hacía sus tareas escolares en la sala, y mi esposa aún no llegaba del trabajo. Entre el ruido del chorro de agua y el sonido de la vajilla, súbitamente, se dejó escuchar un largo, agudo y lacerante “miau”. Giré sobre mis talones, y en el centro mismo de la cocina vi a Kitty otra vez.
Había regresado escuálido, cubierto de magulladuras y hambriento. En la oscuridad de la noche y a través de la nieve pudo encontrar el camino de vuelta, e ingresó a la casa a través de su “gatera”. Nunca supimos dónde se guareció durante su desaparición.
Al día siguiente no fui a trabajar, debía recoger los afiches colocados en cada rincón del pueblo. Mientras avanzaba calle por calle, las personas se detenían para saludarme y participar de la buena nueva. Retiraba algunos afiches cerca de la escuela cuando noté que un auto se acercaba lentamente, el chofer sobreparó frente a mí, bajó su ventanilla y me preguntó si Kitty había aparecido. Yo le dije que sí.
El auto continuó rodando un poco más, y volvió a sobrepararse cerca de un grupo de estudiantes que jugaban frente a la escuela. El chofer bajó la ventanilla otra vez, y gritó: “Kitty is back!”.
Los muchachos saltaron en el aire y a coro exclamaron: “Yes!!”.
P.D.: Kitty continúa con nosotros, goza de buena salud y envía un cariñoso “miau” para todos los lectores de Confesiones a un Árbol.
New Hampshire, USA
Febrero, 2014
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ES BONITO VER COMO LA PERDIDA DEL GATITO DA LUGAR A UN RELATO LLENO DE TANTAS HISTORIAS INTERESANTES,,,, ME GUSTO MUCHO¡¡¡¡
ResponderBorrarTU AMIGA TERESA TRUJILLO
Gracias por la observación estimada Techy. Un buen fin de semana, saludos para Dominique!
BorrarTriste y bello relato sobre la desaparicion de Kitty durante 7 dias y 7 noches...pero una alegria cuando apareció y parece que toda la gente de tu ciudad conoce a Kitty....una conmovedora historia.
ResponderBorrarGracias hermano por compartirlo....Saludos desde Alemania
Mary
Hola Mary, muchas gracias por tu lectura. Un buen fin de semana y haz llegar mi cariño a la familia en Alemania!!
BorrarEduardo
Hola Eduardo. Definitivamente veo un escritoren ti. Los giros idiomaticos son muy interezantes. La trama creo que se podria trabajar un poco más. Felicitaciones.
ResponderBorrarFausto Ravel.
Muchas gracias estimado Fausto, aprecio tus palabras. Nos esforzaremos un poquito más...
BorrarUn abrazo,
Eduardo
Que lindo relato ..! gracias a Dios que kitty ya esta en casa y feliz ...un abraso grande
ResponderBorrarMuchas gracias Paola Fuentes. Un abrazo grande para tí!!
BorrarBellísimo relato, Eduardo. Nos transportas a tu antojo, de un lado a otro, con una sencillez impresionante. Me pasa con cada cosa tuya que leo, que no puedo parar hasta terminar. Qué interesante, nos hablas del amor a las mascotas, hasta la solidaridad de tus vecinos, sin importar ni raza ni color. Cautivante, querido amigo. Te felicito de todo corazón.
ResponderBorrarMuchas gracias querido Koky, aprecio inmensamente tus palabras. Todo un privilegio el recibir tus líneas las mismas que transmiten la misma calidez de nuestra buena amistad en los claustros universitarios de la Facultad de derecho en Trujillo.
BorrarUn abrazo fraterno para ti!!
Eduardo
Hermoso relato amigo y más hermosos son los ojos de kitty y los bellos ojos de Dorothy!!! Esta historia no solo muestra el amor de una familia hacia kitty. Vemos a todo el pueblo involucrado en la búsqueda de este hermoso gatito. Me gustó mucho y me remontó a la época cuando de niña en Chimbote tenía mi gato y me gustaba escuchar su ronronear a la hora de dormir.
ResponderBorrarBuen fin de semana. Saludos a Dorothy.
Tu amiga Ana
Hey Anita, muchas gracias por tus palabras y por tu compañía en Confesiones a un Árbol.
Borrar...Sigamos sacando adelante el proyecto "Chibolos del '72!!
Un abrazo,
Eduardo
Hermoso relato de las aventuras de Mr. cat "kitty". Uno se llega acostumbrar con sus mascotas que llega a ser parte de la familia. Eduardo que pases bien los días de descanso. Saludos.
ResponderBorrarWilly Martínez Loyola
Igualmente Willy, un buen fin de semana. Gracias por escribir. Cariños para la familia!!
BorrarEduardo
MUY TIERNA LA HISTORIA AMIGO,YA TU SABES LO MUCHO QUE ME GUSTAN LOS ANIMALITOS,,
ResponderBorrarUN ABRAZO.
TU PATA CHACA.
Desde luego Chaca, tú y tus queridos dogs son como una verdadera brotherhood!!
BorrarTu pata Chato
Bello relato Lalito, como la cotidianidad esconden tan hermosos relatos, como un sentimiento supera barreras étnicas y hace aflorar lo mejor del ser humano, la solidaridad, la alegria, pareciera que estos animalitos estarian en este mundo para enseñarnos como debemos vivir los humanos, gracias Lalito.
ResponderBorrarCarlos Vargas Cueva
Hey Hugo (no me acostumbre a llamarte Carlos... te conozco como Huguito desde niños!) muchas gracias por tan bellas y significativas palabras.
BorrarÉxitos con tu música hermano!!
Eduardo
Felicitaciones por seguir escribiendo y me gusta , por que mas lindo escribir las vivencias de uno. FELICIDADES
ResponderBorrarSaludos María, no conozco nada de ti, sólo tu nombre, pero MARÍA es un nombre que se basta por sí solo.
BorrarGracias por escribir,
Eduardo
La exquisitez esta en hacer de lo sencillo algo maravilloso, es así tu relato Eduardo, como los hechos cotidianos, que están llenos de amor, con ellos puedes relatarnos y trasmitir tus sentimientos. Buena Ed. Que continúen los éxitos amigo. Un fuerte abrazo y muchos “miau”.
ResponderBorrarMuchas gracias Bernardo, aprecio inmensamente tus palabras!! Un abrazo grande para ti, cariños para tu Rodrigo... y muchos "miaus" para todos!!
BorrarEduardo
Gracias Eduardo por regalarnos este hermoso relato, en verdad me encantó demuestra así la gran ternura y amor a las mascotas de toda la familia.
ResponderBorrarAbrazos Eduardo - Víctor Santana - Tampa, Florida
Hey Víctor, muchas gracias hermano. Arriba Huaral!! Saludos para los amigos y familiares por Tampa en Florida!!
BorrarEduardo
Que hermoso,no te imaginas como disfrute cada instante que viviste...tambien mi hijo porque me pregunto: que pasa mami? ,cuando me escucho decir; ahh....en el momento que kitty regreso'.Gracias amigo,me arrancaste muchas emociones y sonrisas,lo que solo un buen escritor lo hace.un Un abrazo.
ResponderBorrarEstimada Magaly, he leído tus líneas con especial gratitud. Muchas Gracias!!
BorrarCariños para la familia, bendiciones en tu hogar!!
Eduardo
Gracias querido Eduardo!! No te imaginas como disfrute la historia:bueno a mi hijo Elias tambien le encanto,me escucho decir un: ahhh...y tuvo curiosidad,nos encanto a los dos y lograste,emocionarnos tanto.Un abrazo.
ResponderBorrarGracias otra vez Magaly!! Bendiciones.
BorrarEduardo
Linda historia Eduardo! Tomas como "pretexto" la desaparición de Kitty y nos cuentas algo más grande y completo: biografía, diversidad cultural, historia familiar. Interesante poder conocer un poco más de ti y de tus vecinos, conocer ese rasgo de la cultura americana en cuanto a sus animales, y me impresionó la solidaridad de tus vecinos.
ResponderBorrar(... si todos los activistas políticos peruanos retiraran su propaganda después de las elecciones, que bonito sería!!)
Kitty, Kitty cuantas veces Kitty, ya lo siento parte de mi propia familia!!
Un abrazo de pelícano Ed, saludos para Terry, Dorothy y Kitty (... todos terminan con “y”)
Tu amigo Marco.
Hola Marco, siempre un placer leer tus acuciosas observaciones. Te agradezco tu permanente lectura y compañía a lo largo de este proyecto. Que las cosas vayan bien por TOCCO Salón!!
BorrarUn abrazo,
Eduardo
Que linda historia, cuando lo leía se me llenó los ojos de lagrimas cuando se había perdido. Cuando una adopta una mascota forma parte de tu familia, lo quieres, lo proteges y lo cuidas para que no le pase nada. Tengo una perrita que me regalaron, al principio no quise porque se necesita de cuidados y de tiempo y sacar a pasear para que haga sus necesidades. Y pensaba también si tenia que viajar quien lo cuidaba eso me ponía mas triste, pero mis hijas quería una mascota.
ResponderBorrarAcepté el regalo de la perrita que es de raza chip su y maltés de color blanca, te digo que nos cambió la vida. ¿Porqué ? hay veces llegamos cansada de trabajo sin ganas de nada, mis hijas venían de la escuela cansada y se dormían y lo levantaba solo para cenar. Cumplió un año mi mascota ( Lucia) y es la bb de la casa, es la mas engreída, siempre nos espera como si supiera los horarios de nosotros, nos mira desde la ventana cuando estamos llegando, y es una alegría viceversa cuando la vemos. Y es muy cuidadosa de mis hijas, se sube a las camas de ellas y las observa si están dormidas, y luego se va a su cucha a dormir.
Cuando quiere salir a pasear saca su correa, ya tiene su horario para que salga a hacer sus necesidades, nunca me dio trabajo, al contrario nos alegro la vida. cuando leí tu historia, al final tuvo un final feliz que Kitty regresó con su familia porque las mascotas sienten y regresan con la gente que lo ama y lo cuida.
Besos y cuidate, saludos a tu familia EDUARDO
Kelly Chávez
Hola Kelly!! Un gusto grande saber algo de tí... y muchas gracias por compartir tantas cosas lindas de tu perrita Lucía!! Comparto plenamente tus reflexiones acerca de la mascotas y te agradezco tremendamente por tomarte el tiempo para leernos y escribir.
BorrarCariños por casa!!
Eduardo
Tuve el privilegio de "vivir" con intensidad, el extravío del mencionado minino, recuerdo incluso que en uno de esos siete días, ante cierto penar del escritor, le recordé la frase de Sócrates, "La esperanza es el sueño de las personas despiertas".
ResponderBorrarHermosa historia que nos deja paradigmas dignos de resaltar, como la solidaridad del pequeño pueblo tanto en la búsqueda como en el hallazgo de Kitty, (en Chimbote seguro que la hubieron cocinado en punto de cabrito); lo segundo que deseo resaltar, es el gesto cívico de Eduardo, de recoger los carteles, ejemplo que deben seguir empresarios y políticos cuando destrozan el ornato de la ciudad.
Abrazos de admiración, querido Ed.
Gracias Rolando, me encanta saber que recuerdes "en vivo y en directo" los días de la desaparición de Kitty!!
BorrarAprecio siempre tus palabras.
Eduardo
EDUU.. De verdad lindo y conmovedor... La historia de Kitty... Y con mucha pena de pensar cómo sufrió los 7 días.. Espero q no vuelvas a perder la calma... Miauu... Miauu... un feliz domingo con tu familia.
ResponderBorrarBendiciones...
Gladys Zevallos Chavez
Estimada Gladys, gracias por escribir... y por tu consejo!! Felicidades por tu segundo nieto que está en camino...
BorrarFeliz domingo!!
Eduardo
Muy gracioso este nuevo y espectacular relato; pero lo mas sorprendente me pareció la solidaridad de regular parte de los habitantes de Rollinsford de como llegan a amar a sus mascotas, porque no siendo de ellos "Kitty" finalmente parecían sus "familiares" y estaban al tanto de su aparición. Pienso que el gato actuó de esa forma, porque jamás te vió en tu máximo estado de un "enojo impacentado" y saliendo disparado, se fue sin rumbo y se perdió, máxime que no ayudó por esos días la crudez del frio-nieve; pero finalmente Kitty debe jaber tenido "un sexto sentido" o como dicen las historietas por el olor a su terruño (hábitat) perros o gatos regresan.
ResponderBorrarFinalmente lo mas importante fue, que, de nuevo todos Uds. siguieron llevando la vida en la normal compañía de Kitty; si !! algo pasó con el gato en su huida seguramente se peleó, no comió, etc etc pero al llegar a casa Kitty sacó una enorme lección : "no hay como estar con mi familia por eso debo portarme bien"!!
Nelly QS
Hola Nelly, gracias por escribir, me gusta cuando dices: "no hay como estar con mi familia por eso debo portarme bien". Se lo mencionaré a Kitty Jajaja...!! Fuera de bromas, aprecio inmensamente el tiempo que te tomas para leernos y escribir.
BorrarUn abrazo,
Eduardo
Si mi vida (espacio de tiempo; por mis quehaceres, obligaciones propias o personales y del trabajo mas de estar atenta al cuidado de mi madre; darme tiempo para los mios de Chimbote además de mis hijas : comunicarme con ellas etc etc) por la forma tan disciplinada que llevo mi vida, en verdad se me hace corto el tiempo y eso me pone tensa porque no quisiera que acabe el día para culminar todo lo que me propongo. Ahh pero eso si, para leer si no es corto el tiempo pues ampliamente uno de mis hobbies es leer mucho y eso me apasiona y me hace feliz, como en esta vez, que estuve ocupada en este domingo y apenas pude, me puse a leer el relato "KITTY SE HA PERDIDO" Autor: Eduardo Queveso Serrano y en la foto veo a Dorothy Elsa mi linda sobrina con unos ojos asombrosamente cautivadores y penetrantes.
BorrarEcha Nelly... Twitter!! Mientras que yo, como decía el amigo Calderón, zapatero del barrio: "Yo no sabo" Jejeje...!!
BorrarGracias por tus bellas palabras!!
Un abrazo,
Eduardo
Eduardo acabo de leer tu relato, me encanto, deja ver el amor y la union de tu familia y un poco deja ver la tranquilida y la paz de se puede percibir de la ciudad donde vives....te felicito por ese talento que tienes, tu forma de escribir una narrativa exelente que mantiene al lector avido de saber, asi me quede pensando : donde habra estado esos dias Kitty??
ResponderBorrarUn abrazo amigo !
Hey Pepe, muchas gracias por tus palabras. ¿Sabes? Nosotros somos casi vecinos, un día de éstos tenemos que encontrarnos en Boston (MA), Rollinsford (NH), o “cancha neutral”.
BorrarUn abrazo,
Eduardo
Hermoso relato amigo, me gustó mucho, que talento tienes para escribir y deleitarnos con tus vivencias familiares, plasmadas en un excelente relato. Saludos amigo.
ResponderBorrarHola Juana, muchas gracias por escribir. Aprecio tus palabras. Hago llegar saludos cariñosos para tu familia.
BorrarUn abrazo,
Eduardo
EDUARDO, 7 DIAS, 7 NOCHES Y 7 VIDAS QUE TRIANGULO DE KITTY, LO IMPORTANTE ES QUE RETORNO A SU "REFUGIO". DOROTHY DEBE ESTAR AUN MUCHO MAS COMPLACIDA DESDE AQUEL MOMENTO, CONTAR NUEVAMENTE CON KITTY ENTRE UDS. UN ANIMALITO ES SIEMPRE UN ANIMALITO, PERO ES EL MEJOR AMIGO DEL SER HUMANO.
ResponderBorrarSALUDOS EDUARDO.
Hey Segundo, muchas gracias hermano. Éxitos por Milán, Italia, que tus proyectos se cristalicen... y siempre Dale "U"!!
BorrarUn abrazo,
Eduardo
Hola Eduardo, no soy experto en estudiar a los escritores, pero me parece que la virtud de ellos es cargar de vida las palabras, tu lo logras cada vez mejor; la vida es un milagro y compartirla nos hace feliz. Un abrazo para todos ustedes, una caricia para Kitty.
ResponderBorrarHola Segundo, muchas gracias por escribir, aprecio tus palabras. Un saludo cariñoso para tu familia en Chimbote y Lima. Que continúen los éxitos profesionales!
BorrarEduardo
Eduardo fue muy lindo como siempre tu relato, quienes tenemos mascotas sabemos cuanta preocupación nos causa cuando algo les sucede, mas aun cuando desaparecen, espero con ansias tu próxima entrega, un abrazo.
ResponderBorrarAlicia Castillo de Sirvas
Muchas gracias Alicia, siempre un placer recibir tus palabras. Cariños para la familia. Bendiciones!
BorrarEduardo..me trae muchos recuerdo cuando era niño llegaba a tu casa encontraba los gatos que tenían que hacerle cariño para que me dejen tranquilo... Me imagino la preocupación de Ustedes y los estudiantes que había desaparecido Kitty (gatito)..
ResponderBorrarMe gusto tu relato sabemos quienes que tenemos una mascota nos costumbramos con los animalitos que son muy cariñosos..Un fuerte abrazo a la distancia..
Pedro Vazquez Ramirez
Hey Perico, gracias por recordar a los gatitos de entonces. Tú eras como un miembro más de la familia, así que esa parte del relato la conoces de primera mano!
BorrarCariños para el pequeño Fabricio y para toda tu familia!!
Eduardo
Eduardo hermoso relato, me impresiono con la facilidad con las que nos transportas para luego consumir tus relatos, es lógico que kitty al ser un miembro mas de tu familia, tuvieran que hacer todo lo que hicieron para su posterior aparición. Estaré mas pendiente de tus próximos relatos.
ResponderBorrarUn saludo a tu linda familia, al cual tuve el placer de conocerlos cuando visitaron la ciudad de Chimbote.
Alfonso Anticona Garcia
Hey Alfonso, gracias por escribir. Esa reunión de Chimbote tenemos que repetirla, te tendré al tanto de mi próxima visita!!
BorrarUn abrazo,
Eduardo
Eduardo, caramba siguen nuestras vidas vidas y experiencias similares aunque es verdad, casi todos los humanos tenemos experiencias comunes con mascotas llámense perros o gatos. Hace unas semanas escribí la historia de mi gato Silvestre que también es negro con pecho blanco, en ella narré que trajo a una compañera a casa, la cual parió 5 gatiros sin mi "autorización" en mi azotea, Bueno pues por más sensibilización que hice por el facebook, nadie vino a adoptarlos, así es que hasta ahora tengo un gran problema que espero pronto se resuelva. En esa historia también cuento que "Silvestre" desapareció por 9 días y ahora ya sabemos que los gatos hacen eso cuando de van en busca de una gata en celo (De ahí la fama del gato) Su fidelidad es limitada a diferencia del perro.
ResponderBorrarKitty tu gato desapareció por la mismas razones que mi gato, "es el amor" que les llega y responden a ese llamado aún a sabiendas que le costará muy caro. De ahí las magulladuras porque se peleará más de una vez con los rivales. Eduardo una vez te admiro por la prolijidad de tu cuento.. yo estoy a leguas de ello, Eduardo sigue escribiendo como tú sabes. Es más creo que debemos asociarnos para hacer un compilado de tus cuentos y hacer que los niños y jóvenes de las escuelas de Chimbote los lean. A mis colegas de Comunicación les ha encantado tus cuentos y me indican que sería muy bueno que los niños y jóvenes de las escuelas de Chimbote los lean.
Un abrazo.
ALBERTO BAZÁN
Hola Alberto, gracias por escribir. Sí recuerdo la historia de "Silvestre" que compartiste a través de Facebook, recuerdo también haberla comentado y seguido su desarrollo con interés durante esos días. De todas maneras te deseo suerte con el desenlace de tan numerosa prole gatuna!
BorrarMis relatos están a tu disposición. Estoy seguro que sabes que aquí en USA hay una cadena de escuelas que los utiliza con sus alumnos.
Un abrazo,
Eduardo
ResponderBorrarHOLA EDUARDITO:
Muy hermoso, interesante e impactante relato, en el cual nos detallas, la necesidad que tenemos todos los humanos padres de hijo único de cubrir esa carencia de hermanos y ceder ante el pedido de esa "MASCOTITA" que los llenará de amor, alegría y ternura, exponiéndonos muchas veces a recibir críticas de personas que no entienden el objetivo de la crianza de ese animal.
En mi caso te entiendo perfectamente, porque a mí me pasó lo mismo, tuve la necesidad de adoptar una perrita de un mes de nacida por el mismo motivo, porque Romina mi única hija venía clamando su mascotita varios años, hasta que finalmente cedí.
En el desarrollo de la trama narrativa y descriptiva de tu escrito , me encanta y me causa mucha gracia: "MI PADRE DISFRUTABA CON FRUICIÓN DE UNA INFUNDADA FAMA DE BRUJO Y EL MISMO ATIZABA LA HOGUERA DE SU REPUTACIÓN CRIANDO MININOS QUE SÓLO TUVIERAN EL OSCURO COLOR DE LAS SOMBRAS" jajaja. que bandido tu papá.!!!!
"UNA DOCENA DE GATOS NEGROS COMÍAN PAN SOBRE EL MOSTRADOR DE NUESTRA TIENDA DE ABARROTES" jajaja. qué espectáculo!!!!
"Y NO FALTABAN ALGUNOS QUE HACÍAN HUECOS EN EL SUELO DE TIERRA DE NUESTRAS HABITACIONES PARA HACER SUS NECESIDADES" jajaja.!!!!, por lo menos hacían el hueco y después se tapaba jajaja!!!!
Con toda la movida que tuviste que hacer para recuperar el animal, cómo te debes haber arrepentido del maltrato que le hiciste jajaja!!! y el animal inteligente te castigó y se vengó jajaja.!!!! 8 días.
Es impresionante y conmovedor, el amor, el cariño y la SOLIDARIDAD de todo un pueblo ante la desaparición de un ANIMAL!!!!! Muy buena la lección que te dio KITTY!!!
jajaja.
Excelente relato, y muy buena ENSEÑANZA, me encantó!!!!!
UN FUERTE ABRAZO HIJO!!!!
TU AMIGA:
NARCISA.
Querida mamá Narcisa, siempre espero tus comentarios con expectativa y una vez llegados... los disfruto ampliamente!! Mientras leía tus líneas me reía a carcajadas, estando Terry cerca a mi, me preguntó de qué me reía tanto. Se lo traduje... y reímos juntos. Estoy seguro que más tarde volveremos a reir... cuando se lo lea a Dorothy!
BorrarUn abrazo, gracias por estos momentos y gracias por tu amistad!!
Eduardo
Bueno Eduardo, disculpa que cuando contesto ha veces no aparece; pero ya habìa comentado sobre la perdida de tu gatito y me gusto que quieran a las mascotas, tambièn te comente que a mi hermano le gustaban mucho los gatos, gracias por querer a los animalitos que son unos mascotas bien queridos.
ResponderBorrarTu amigo,
Elmer Alberto Laureano Cornelio
Hola Elmer, gracias por escribir. Y disculpa, en realidad recibo muchas quejas por lo complicado del sistema para dejar un comentario. La próxima me lo envías a través de Facebook, o a mi correo: edquevedo@yahoo.com
BorrarUn abrazo,
Eduardo